Universidad Nacional de Tres de Febrero

Aprobado por CONEAU en Sesión 379/13

La educación superior es hoy un factor estratégico de desarrollo de los individuos, los países y las regiones. El diseño de políticas de educación superior y su implementación es considerado por gobiernos, organismos internacionales y expertos como prioridad en una sociedad y una economía caracterizada por el uso intensivo de los recursos intangibles. Las Tecnologías de la Información y la Comunicación impactan en todos los ámbitos de la actividad humana configurando nuevas formas de producción, validación y difusión del conocimiento, lo que exige profundizar la cuestión de su gestión en y a través de la educación superior.

En este marco, se espera que las tareas tradicionales de docencia e investigación sean acompañadas por el compromiso de brindar contribuciones en términos de conocimiento relevante para una gama de intereses y necesidades de todos los actores sociales insertos en la trama comunitaria a la que la Universidad pertenece. La defendida autonomía universitaria no debe entenderse como sinónimo de aislamiento o ausencia de interacciones con otros actores ajenos al ámbito académico, sino como la capacidad de elegir los interlocutores, participar en las negociaciones para definir los términos de intercambio y distribución de los beneficios trascendiendo la racionalidad económico-instrumental.

El Doctorado en Políticas y Gestión de la Educación Superior se orienta a la formación de un profesional de la educación comprometido con las exigencias de su contexto, capaz de realizar aportes significativos y socialmente relevantes, fortaleciendo el trabajo conjunto y valorando el pensamiento educativo latinoamericano, en la búsqueda de una educación de calidad para todos.

Esta propuesta formativa se presenta como una respuesta a la demandas de profesores, académicos, gestores educativos, directivos, consultores especializados y funcionarios del sector de educación superior para formarse como investigadores y académicos, capaces de dirigir proyectos de investigación y proponer, orientar, implementar y evaluar políticas, programas y prácticas educativas a la altura de los desafíos que presentan sociedades altamente complejas. Este desafío de la complejidad ha de abordarse mediante una estructura curricular que necesariamente habrá de incorporar distintas perspectivas teóricas y herramientas metodológicas, bajo los principios de interdisciplinariedad, flexibilidad, integralidad y pertinencia social.

Más información